Pues otro año que se nos va, con o sin
nuestros objetivos cumplidos, con o sin nuestros deseos realizados,... y así
una larga lista que empezará de nuevo este año venidero. Es como reiniciar el
ordenador, empezamos de nuevo pero sin dejar atrás la enorme carga que llevamos
arrastrando todos estos años, eso sí, siempre con intención de mejorar. Porque
sino es así, ¿de qué nos sirve seguir hacia delante?.
Este
año que acaba ha sido nefasto en muchos aspectos, que todos tenemos presentes a
todas horas, en lo económico, en lo social. Pero también ha habido mucho
positivo y me quedo con eso.
Siempre
hay proyectos que se abren paso, demostrando que es posible, duro, difícil,
pero posible.
Todo esto me hace sentir parte de algo. Me siento como una montaña de arena compuesta d emuchos granos que todos juntos logran grandes cosas
Todo esto me hace sentir parte de algo. Me siento como una montaña de arena compuesta d emuchos granos que todos juntos logran grandes cosas
Al
próximo año, que empieza en unos días, en lo profesional le pido oportunidades,
entra dentro de mi papel el saber aprovecharlas. Le pido justicia, que el
esfuerzo siga obteniendo su recompensa y el aprovechamiento de los demás su
castigo.
En fin, os deseo que este año os vaya todo de lujo y que os marquéis
objetivos y sonriáis mucho y seáis tremendamente felices porque, maldita sea,
nos lo merecemos